La Región de Los Lagos se sumó al escándalo nacional por las licencias médicas utilizadas irregularmente por funcionarios públicos. En su informe más reciente, la Contraloría General de la República reveló que la Municipalidad de Osorno reportó 199 casos, mientras que la Municipalidad de Futaleufú registró 180 funcionarios que habrían viajado al extranjero mientras se encontraban con licencia médica.
Estas cifras posicionan a ambas comunas entre las 50 instituciones públicas más afectadas del país, en un listado que incluye también a ministerios, servicios descentralizados, hospitales y empresas estatales como Banco Estado y Metro de Santiago.
El caso ha generado un fuerte impacto político y administrativo a nivel nacional y regional. La Fiscalía Nacional abrió una investigación penal de oficio, mientras que la Contraloría remitió los antecedentes al Consejo de Defensa del Estado (CDE) e inició sumarios administrativos en tres instituciones clave: Fonasa, Compin y la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso).
¿Por qué importa?
La inclusión de comunas como Futaleufú, uno de los territorios más apartados de la Región de Los Lagos, demuestra que las fallas en el control de licencias médicas afectan tanto a grandes ciudades como a zonas rurales. En el caso de Osorno, una de las comunas más pobladas del sur de Chile, la magnitud del problema sugiere posibles redes de fraude administrativo o deficiencias estructurales en la supervisión interna.
La Contraloría había informado anteriormente que más de 25.000 funcionarios públicos salieron del país en medio de licencias médicas, abriendo un flanco crítico para el Gobierno, especialmente por el involucramiento de entidades dependientes de los ministerios de Educación, Justicia y Desarrollo Social.
La oposición ha exigido sanciones ejemplares y la desvinculación inmediata de los involucrados, mientras crecen las presiones para auditar en profundidad el sistema de licencias médicas en el aparato público.