Una escena digna de documental se vivió en el desierto de Atacama, cuando un torbellino de polvo —también conocido como “diablo de polvo”— se levantó con fuerza en las cercanías de Copiapó.
Este tipo de vórtices se forma en zonas áridas bajo condiciones específicas, como temperaturas elevadas, suelo seco y cielo despejado. A diferencia de los tornados, no necesitan nubes para generarse. En este caso, el pasado viernes alcanzó cerca de 30°C, lo que favoreció la aparición de esta columna de polvo que puede superar los 90 km/h y alcanzar alturas de hasta 300 metros.
Aunque suelen ser menos destructivos que otros eventos atmosféricos, los “diablos de polvo” no dejan de ser impresionantes. En Atacama, el fenómeno dejó postales que recordaron la fuerza de la naturaleza en uno de los climas más extremos del país.
¡Un gigantesco diablo de polvo 🌪️ se forma en el interior de #Atacama, Chile! Las grandes dimensiones del fenómeno sorprendieron a los habitantes de la zona. pic.twitter.com/8xhkdAafmt
— Meteored.cl (@meteoredcl) July 19, 2025