El Concejo Municipal de Llanquihue eligió este lunes a Cristian Olavarría (Frente Amplio) como alcalde suplente, en una votación realizada tras la destitución del exalcalde Víctor Angulo, quien fue removido por el Servel luego de que el Tribunal Electoral Regional (TER) confirmara graves irregularidades administrativas y financieras en la gestión comunal entre 2018 y 2022.
La designación se produce en un contexto político complejo, pues el nuevo alcalde enfrentó en julio pasado una causa por conducción en estado de ebriedad, situación que él reconoció como “un error”.
La votación del Concejo Municipal
Durante la sesión extraordinaria, los concejales definieron la sucesión en la alcaldía, inclinándose por Olavarría, quien asumirá el liderazgo de manera inmediata mientras se regulariza la continuidad institucional del municipio.
El nuevo jefe comunal afirmó que su gestión se centrará en “restablecer la normalidad institucional y retomar el trabajo municipal con foco en la comunidad de Llanquihue”.
Las irregularidades que derivaron en la salida de Víctor Angulo
El TER acogió los cargos presentados en 2024 por los entonces concejales Luis Oróstica y el propio Olavarría, acreditando deficiencias en el control jerárquico sobre el Departamento de Administración y Finanzas.
El tribunal concluyó que estos hechos configuraban notable abandono de deberes y faltas a la probidad, lo que derivó en la destitución de Angulo.
Antecedente previo: la detención de Olavarría por conducción en estado de ebriedad
A fines de julio de este año, antes de su designación como alcalde suplente, Cristian Olavarría fue detenido por Carabineros del retén Los Pellines tras ser sorprendido manejando bajo los efectos del alcohol en el sector de Totoral.
Según los primeros antecedentes difundidos por Radio Bío Bío, el concejal registró 1.84 gramos de alcohol por litro de sangre en el test inicial, por lo que fue detenido y su vehículo retirado del lugar.
Posteriormente, el Ministerio Público lo dejó apercibido, a la espera de los resultados del examen de sangre definitivo.
Dado que Olavarría también es funcionario del Hospital de Llanquihue, el Servicio de Salud del Reloncaví informó en esa oportunidad, que evaluaría antecedentes para eventuales medidas administrativas.
La declaración pública de Olavarría
Tras el hecho, el entonces concejal y dirigente de la FENATS, emitió un comunicado señalando que:
“Fue un error que no debe repetirse. No estoy por sobre la ley y enfrentaré las consecuencias que correspondan con total disposición y transparencia.”
Indicó además estar consciente del rol público que representa y de la confianza depositada por los vecinos.