La reciente inauguración del megapuerto de Chancay en Perú, ubicado a 80 kilómetros al norte de Lima, está generando preocupación en la industria marítima en Chile. Este ambicioso proyecto, financiado por la estatal china Cosco Shipping, busca posicionarse como el principal hub de comercio en el Pacífico Sur, conectando de manera eficiente a Sudamérica con los mercados asiáticos.
El puerto de Puerto Montt, conocido por su especialización en exportaciones de productos acuícolas y pesqueros, podría enfrentar una reducción en su volumen de operaciones. La capacidad del megapuerto peruano para manejar grandes cantidades de carga y ofrecer rutas directas hacia Asia podría atraer a exportadores que actualmente utilizan terminales chilenas, afectando las dinámicas logísticas y comerciales locales.
Según David Hinostroza, experto en logística portuaria, "Chancay representa un cambio de paradigma en el comercio marítimo regional. Su capacidad de competir en costos y tiempos podría desplazar parte del flujo de exportaciones que tradicionalmente pasa por puertos chilenos".
El ministro de Relaciones Exteriores de Chile, Alberto Van Klaveren, reconoció el desafío y enfatizó la necesidad de acelerar los planes de modernización portuaria, especialmente en terminales clave como San Antonio y Valparaíso. "Debemos fortalecer nuestra infraestructura para mantenernos competitivos en el comercio marítimo internacional", señaló.
Impacto en Puerto Montt
Aunque el puerto de Puerto Montt no compite directamente en la misma escala que terminales como San Antonio, los expertos advierten que podría verse afectado indirectamente por la redirección de cargas y el fortalecimiento logístico del megapuerto peruano. Además, la eficiencia de Chancay podría aumentar las expectativas de los exportadores locales, exigiendo mejoras en infraestructura y servicios en los puertos chilenos.
Plan de acción necesario
Para enfrentar este nuevo escenario, autoridades y operadores portuarios en Chile han propuesto:
- Modernizar los puertos nacionales, incluyendo la incorporación de tecnología avanzada.
- Fortalecer la eficiencia logística, mejorando las conexiones terrestres y marítimas.
- Ampliar las relaciones comerciales internacionales para diversificar los mercados de exportación.
San Antonio, clave en la respuesta chilena
Según T13.cl, el puerto de San Antonio podría experimentar una modernización inédita gracias a capitales estadounidenses. En las próximas semanas, un grupo de inversores tecnológicos, coordinados por el Development Finance Corporation, visitará el puerto para evaluar su participación en el proyecto. Estas conversaciones comenzaron en septiembre durante una reunión entre delegaciones diplomáticas de Chile y Estados Unidos, donde el subsecretario del Departamento de Estado, Kurt Campbell, enfatizó la intención de Washington de potenciar inversiones tecnológicas en países aliados como Chile.
El impulso del proyecto también responde al impacto geopolítico del megapuerto de Chancay. La administración entrante de Donald Trump ha anunciado posibles aranceles de hasta un 60% a bienes exportados desde el puerto peruano, lo que podría beneficiar a puertos chilenos como San Antonio si se concreta la modernización.
Oportunidades y desafíos
El posible conflicto comercial entre Estados Unidos y China, sumado a la relación prioritaria que Washington desea fortalecer con aliados en el Pacífico, podría posicionar a Chile como un actor clave en el comercio regional. Sin embargo, este escenario también impone un desafío a la política de neutralidad y comercio abierto de Chile.
Mientras tanto, el puerto de Puerto Montt y otros terminales deberán buscar formas de adaptarse a la nueva competencia, con inversiones en infraestructura, mejoras logísticas y diversificación de mercados como prioridades inmediatas.
Futuro incierto pero prometedor
Chile enfrenta un doble desafío: competir con la eficiencia y escala del megapuerto de Chancay, mientras capitaliza el interés de Estados Unidos en fortalecer sus relaciones económicas en la región. La llegada de inversionistas al puerto de San Antonio podría marcar un antes y un después en la estrategia marítima del país, beneficiando no solo a la región central, sino también al sur, donde puertos como el de Puerto Montt esperan mantenerse relevantes en el comercio global.
La pregunta ahora es si Chile estará listo para aprovechar esta oportunidad histórica mientras enfrenta la creciente influencia de China en el Pacífico Sur.