Eduardo Parada asumió la presidencia de la Comisión de Género del Consejo Regional de Los Lagos, marcando un hito en la historia de la instancia, ya que es el primer hombre en liderar este espacio. Parada, delineó sus objetivos políticos y financieros, asegurando que su gestión priorizará la eficiencia en el uso de los recursos del Gobierno Regional (GORE), en el contexto de un presupuesto regional ajustado.
Parada también destacó que la comisión priorizará la visibilización de la violencia de género contra los hombres como una problemática que debe ser reconocida y atendida en el debate público, para que los proyectos aprobados en materia de equidad de género tengan un impacto real en la ciudadanía. En términos políticos, enfatizó la importancia de promover la igualdad de derechos y deberes, rechazando la idea de que se deban restar derechos a un grupo en favor de otro.
Asimismo, hizo hincapié en la urgencia de visibilizar este tipo de violencia, señalando que la falta de registros oficiales impide dimensionar su impacto real. Parada indicó que su gestión trabajará para incluir este tema en la agenda regional, asegurando que se reconozca y se aborde de manera efectiva una problemática que, según él, no cuenta con registros oficiales y requiere ser evidenciada, al igual que ocurrió en su momento con la violencia intrafamiliar que afecta mayoritariamente a mujeres.
Críticas por su nombramiento
El nombramiento de Parada ha generado opiniones divididas. La consejera de la provincia de Llanquihue por el Frente Amplio, Marión Fernández, expresó su descontento, argumentando que históricamente las mujeres han debido luchar por la equidad de género y que considera injusto que un hombre lidere la comisión.
Por otro lado, la vicepresidenta de la comisión, Yasna Vásquez, también militante del Partido Republicano, defendió la decisión y sostuvo que la designación de Parada busca sensibilizar a otros hombres sobre temas de género.
Las comisiones del pleno del Consejo Regional mantienen su directiva por un año, tras lo cual se evalúa la gestión del presidente para decidir si se mantiene en el cargo o se produce un cambio en la dirección.